miércoles, 8 de agosto de 2012

Defectos y miserias.

Bien, no quiero pensar en nada. Todo lo que escriba en esta entrada puede tener mucho sentido o ninguno, así que lo siento si escribo cosas en las que impere la ilógica pero no voy a marchar otra vez atrás. "No volver a marchar atrás", esa frase en teoría es mi filosofía de vida actual ¿Estoy cumpliendo esa máxima que me impuse? Sí, rotundamente sí, incluso si no lo estuviese haciendo lo debería pensar. También soy más desconfiado y veo que no sólo no me conozco a mí, sino que hay mucha gente que pensaba conocer bien, pero después veo que no los conozco para nada, o también cabe la posibilidad de que simplemente se están intentando enmascarar en lo que no es. A lo mejor yo no soy el que tiene tanto miedo al mañana, aunque siempre he temido a los rugidos del futuro.

No me considero nadie falso, ni superficial, creo que soy claro en todo. Bueno a lo mejor en la superficialidad me equivoco porque estoy viendo que esos aspectos que son tan sólo físicos, externos, me importan demasiado. En ese sentido me doy mucho asco, no debería ser así y éso no tiene ningún perdón. Al menos, mirando el vaso medio vacío, asumo ese defecto mío,  mientras que el resto no lo suele hacer en ellos. Por qué será tan difícil asumir nuestros defectos. No lo sé, tengo la teoría de que si encontrásemos todo éso que no nos gusta de nosotros acabaríamos por romper los espejos para no vernos la cara.

Me da asco la humanidad y con éso me incluyo yo. Cada vez nos importa menos lo que sienta el resto. Sólo vamos mirando al suelo cuando los pedacitos de corazón que caen son nuestros. Y me equivoco, no me doy asco en ese egocentrismo porque yo nunca puedo dejar atrás a alguien que importa aunque sólo sea un poco. Incluso si me han hecho daño o he hecho daño no puedo quedarme sin intentar ayudar, aunque a veces es mejor tirar la toalla. Aquí va otro defecto mío, el de mirar a las personas mientras muchas de ellas no dejan de mirar hacia arriba.
Seré imperfecto, pero como no me lleva a nada criticarme voy a tirar a la basura todo eso que veo en mí y no me gusta. Porque aunque esos fallos no desaparezcan nunca dejaré que me ahoguen en un mar de tinieblas.




1 comentario:

  1. Que nos llamen masoquistas por dar mas de lo que recibimos, que somos así. . .

    ResponderEliminar