miércoles, 2 de enero de 2013

2013 y aquí seguimos

Nada para, ni los mayas ni la propia acción humana han parado el pasar a otro año. El trece no me ha dado buena suerte en el 2012 y no es porque sea supersticioso, sino que múltiples cosas malas que me han pasado han coincidido con el número 13.
Pero aún así seré positivo, puede que sea 2013, pero tan sólo es una cifra que no debe influir en mi vida porque si crees que todo saldrá bien es lo importante.
Por ello, feliz 2013 a todo aquel que se lo merezca.